Manifiesto de Apoyo a la Fábrica de Sombreros

La Fábrica no se quita el Sombrero

El CSOA Fábrica de Sombreros se enfrenta a un proceso judicial para ser desalojado

El primero de mayo de 2008, un grupo heterogéneo de personas y colectivos sociales y vecinales decidimos liberar la Fábrica de Sombreros del abandono, la especulación, la ruina y la degradación. Este inmueble, situado en la calle Heliotropo (barrio de San Luis), es un espacio único en la ciudad de Sevilla: un edificio industrial de finales del siglo XIX de un importante valor arquitectónico y uno de los exponentes del patrimonio fabril del casco norte, reflejo de la historia social y obrera del barrio y de su vecindario.

Desde que la fábrica cerrara sus puertas, hace casi una década, el edificio ha permanecido cerrado y abandonado. Pero no olvidado, siendo reclamado por colectivos artesanos, vecinales y sociales para su uso como espacio social y cultural y para apoyar la actividad artesana en un barrio amenazado por procesos especulativos y de gentrificación. Donde las viviendas de lujo se multiplican a costa de la marcha de sus antiguxs habitantes; donde los corralones de artesanos están acosados, y algunos ya desalojados; donde cada edificio en ruinas es visto no como un drama y una injusticia social sino como una gallina de los huevos de oro; un barrio cada vez más humillado y maltratado, donde las necesidades de lxs vecinxs son olvidadas por parte de las administraciones de Sevilla, “la ciudad de las personas”.

Queremos recordar que el Ayuntamiento se comprometió en 2006 a expropiar la Fábrica de Sombreros en el plazo de dos años para su uso social. Al cumplirse éste sin que se produjera ninguna acción en este sentido, decidimos tomar la iniciativa y recuperarla para el barrio y la ciudad como centro social autogestionado.

Desde entonces venimos trabajando en la creación de un espacio en construcción permanente, horizontal y abierto, en el que socializarnos de otras maneras reduciendo al mínimo las relaciones de poder entre nosotrxs, para educarnos mutuamente y desarrollar prácticas alternativas de ocio, creación e intercambio. Para reinventar nuestros propios tiempos, charlar y aprender con el vecindario. En el callejón Heliotropo escuchamos a lxs más mayores, que nos cuentan cómo ha cambiado el barrio, cómo se sienten abandonadxs por las instituciones, cómo les alegra ver gente con ganas de cambiar la sociedad y cómo se sienten cómplices de nuestra lucha, escuchamos sus historias olvidadas por una sociedad que te considera inútil si no produces y consumes lo bastante.

Tratamos de construir un espacio que esté fuera de la lógica del beneficio económico, que fomente el trueque y el intercambio de conocimientos, reciclar y reutilizar, el respeto al medio ambiente y las prácticas de consumo responsable y consciente. Hemos devuelto la vida a este espacio para permitir que surjan y se expandan prácticas culturales desde abajo, autoorganizadas y experimentales. Sin patentes ni derechos de autor, donde todxs nos sentimos artistas. Un espacio feminista que no segregue a las personas según el género y busque nuevas formas de organización y relación basadas en el cuidado de la vida.

Y lo hemos hecho sin pedir ayudas institucionales, por nosotrxs mismxs y enredándonos con múltiples colectivos del barrio, de Sevilla y de otras ciudades. Participamos en la construcción de un movimiento social que crece día a día con la multiplicación de los espacios sociales, proyectos alternativos y luchas cotidianas. Porque costruyendo centros sociales nos reapropriamos de espacios abandonados transformándolos en lugares de creación autónoma de lenguajes, saberes y deseos que rompen con las dinámicas de circulación del capital. Funcionamos como catalizador y caja de resonancia que permite sumar fuerzas y canalizar nuestra digna rabia hacia la construcción de otra sociedad.

El Centro Social Fábrica de Sombreros es una demostración de que se puede vivir de maneras distintas, opuestas a un sistema insostenible que rechazamos porque se mantiene mediante desigualdades y precariedades laborales, vitales, emocionales. Un sistema en crisis, no sólo financiera sino también ecológica, de cuidados y sobre todo ética, que privatiza las ganancias y socializa las pérdidas.

Al oponernos a él, sabemos que no estamos solxs. Sentimos a nuestro lado a lxs compañerxs y hermanxs que desean un mundo más justo, desde Palestina a Grecia, de las fábricas ocupadas a las comunidades indígenas autónomas, de los suburbios de las metrópolis a los campos de refugiados, del parque Alcosa al Huerto del Rey Moro. Sus luchas también han tenido eco en la Fábrica de Sombreros, junto a la de otros muchos colectivos que nos han ayudado a llenarla de contenidos. En ella se han organizado talleres para compartir conocimientos, exposiciones, conciertos, cabarets, proyecciones, cursos universitarios, presentaciones… mil actividades críticas y rebeldes. Por eso, tras un año de okupación nos sentimos más fuertes que nunca, con muchxs compañerxs a nuestro lado, de la mano de experiencias que han sido y son parte de nuestra historia; Pumarejo, Barrios en Lucha, San Bernardo… ejemplos de dignidad y de esfuerzo colectivo. Y con Casas Viejas en el corazón.

Colectivos artesanos consiguieron que el PGOU contemplara usos artesanales para gran parte de este espacio en su primera versión, pero entre la fase de debate público y la aprobación final “misteriosamente” se borraron zonas artesanas y aparecieron más viviendas. Ahora, el grupo inmobiliario TEMPA -con un amplio historial especulador- quiere poner fin por la vía judicial y policial a este proyecto social y volver a dejar sin uso este espacio. Y de esta forma esperar a que suba el valor del suelo, y a que el Ayuntamiento tarde o temprano les permita construir viviendas y dar un pelotazo.

Pero no lo vamos a permitir: nuestra determinación es firme, vamos a defender este proyecto y la riqueza que hemos creado con todas sus consecuencias.

Llamamos a todxs las personas y colectivos que han pasado la Fábrica de Sombreros y se han sentido libres aquí dentro, y a la ciudadanía en general, a que se movilicen en defensa de un espacio que es de todxs.

Responsabilizamos directamente al Ayuntamiento de Sevilla y a la Junta de Andalucía del abandono de este espacio durante años y de la enorme pérdida cultural, patrimonial, artesanal, histórica y social que supondría su dedicación a un uso privado y especulativo o la vuelta a su lamentable estado anterior de abandono.

Exigimos la paralización del proceso de desalojo y la expropiación inmediata del inmueble para darle un uso social y que siga siendo un espacio liberado, con gestión horizontal y vecinal en el que seguir imaginando y experimentando prácticas autónomas.

NUNCA MÁS UN BARRIO SIN NOSOTRXS
Por los centros sociales, ¡ni un paso atrás!

Centro Social Okupado y Autogestionado Fábrica de Sombreros
c/ Heliotropo, esq Castellar (barrio de San Luis, Sevilla)